Estos días de vacaciones he tenido la suerte de estar viajando permanentemente por varias ciudades. Y que ciudades!!! Granada y Córdoba , son una reliquia árabe , un regalo del pasado fundido en el presente que se disfruta tanto con la vista como con los otros cuatro sentidos. Además de que las propias vacaciones ayudan a meditar una semana como esta es casi obligado hacerlo. Yo soy agnóstico y lo soy porque soy prudente. Pero esta postura no implica ni desconocimiento de las religiones ni desinterés , de hecho me interesa muchísimo. Cuando era pequeño la Semana Santa era mi fiesta favorita, seguía todos los pasos , todos los datos y me emocionaba con saetas , música...
Aunque ahora no conservo tanto interés queda parte de esa emoción que sentía de niño , una emoción entre nostálgica y profunda ,espiritual y humana. Tras leer mucho sobre el cristianismo , el paganismo , mitología comparada y sociología he descubierto que lo que realmente me emociona es el acontecimiento humano , simbólico, profundamente culto y a la vez popularmente ingenuo. Una relación que se repite en el arte , la religión , en la historia... la existencia , la muerte , la muerte para vivir , la resurrección, el sentido de vivir . Todos estos temas transcendentales que se han fundido en diferentes personajes : Baco , Osiris , Mitra, Jesucristo , Gea , la diosa madre... pasean por nuestras calles. Solo hace falta limpiar un poco el polvo que cubre los libros para saber que el ser humano tiene siempre la misma necesidad y que Baco y Jesús son los mismo, que aunque allá por el s.I nació un niño que lideró una revuelta pacífica y murió castigado
todo lo demás es una carga espiritual , religiosa , sobrenatural que se le ha fundido por nuestra propia necesidad. Al fin y al cabo esto es lo que me emociona , que esta antigua mezcla siga vigente en una pequeña parte en las calles de mi ciudad , que pueda ver en un paso un eco de dioses olvidados y vigentes , de un lenguaje en muchos casos olvidado y tergiversado, pero al fin y al cabo vivo.